El Imperio Antiguo de Egipto

Al Imperio Antiguo de Egipto, también se le puede llamar Reino Antiguo, es el período de la historia del Antiguo Egipto comprendido entre 2700 y 2200 a.C. Lo formaban las dinastías III, IV, V y VI.

El Reino antiguo es el nombre dado comúnmente a ese período en el tercer milenio a.c cuando Egipto llego a lo más alto de su desarrollo como civilización consolidando el sistema político, cultural y religioso. Este fue el primer de los tres períodos llamados “Reino” que marcan los puntos altos de la civilización del valle del Nilo (además del Reino Medio y el Reino nuevo o imperio nuevo)

El Imperio antiguo fue seguido por un período de desunión y relativa disminución cultural tras un largo reinado del faraón Neferkara o también llamado Pepy II (gobernó 94 años), y ante la debilidad del poder real, los nomarcas (gobernadores de los nomos) se hacen fuertes, y convierten sus cargos en hereditarios. Después Egipto pasó a un período histórico en el cual se disperso fuertemente el sistema político, siendo denominado por los historiadores primer período intermedio.

Realmente la capital de Egipto durante el Reino antiguo fue ubicada en Menfis, donde el faraon Djoser instauro su corte. El Reino antiguo es conocido, sin embargo, por el gran número de pirámides, que fueron construidas en este momento como lugares de sepultura faraónica. Por esta razón, el Imperio antiguo se conoce como “la edad de las pirámides.”

Las pirámides de Egipto son, de todos los vestigios que nos donaron los egipcios de la Antigüedad, los más asombrosos y emblemáticos monumentos de esta civilización, y en particular, las tres grandes pirámides de Guiza, las tumbas de los reyes Keops, Kefrén y Micerino, cuya construcción asciende, para la gran mayoría de estudiantes, al periodo denominado Imperio Antiguo de Egipto. La Gran Pirámide de Guiza, construida por Keops (Jufu), es una de las siete Maravillas del Mundo.